martes, 19 de marzo de 2019

Muestreos de agua en los embalses de Celemín y Barbate y su importancia en el contexto del Proyecto Remabar



Como se ha adelantado en anteriores publicaciones del blog, la adquisición de datos en el ámbito del Proyecto REMABAR requiere de una exhaustiva labor de muestreo tanto de aguas subterráneas como superficiales. En esta ocasión, los cuerpos de agua objeto de análisis han sido los embalses de Celemín y Barbate. Los embalses son estructuras de regulación fluvial cuya construcción se dirige fundamentalmente a satisfacer las necesidades de agua para abastecimiento y riego, que en algunos casos, se alterna con otros usos como el aprovechamiento hidroeléctrico o recreativo. 

Embalse Barbate

Desde el punto de vista hidrológico y ecológico, los embalses constituyen nuevos ecosistemas de carácter léntico con atributos físico-químicos y biológicos únicos y singulares que van en función de factores como su morfometría e hidrodinámica, las características de la cuenca de drenaje y la climatología.  Asimismo, estos sistemas constituyen espacios de elevado valor biológico, dando sustento a importantes comunidades de avifauna acuática y vegetación palustre entre otras.

Así, el pasado viernes 8 de marzo, miembros del equipo de investigación de REMABAR se desplazaron a sendos embalses para realizar las mediciones necesarias para la caracterización limnológica de estos cuerpos de agua.  

Miembros del equipo investigador del Proyecto REMABAR

El primer muestreo se desarrolló en el embalse de Celemín, cuyas aguas se destinan a riego, y que se ubica en el término municipal de Benalup-Casas Viejas. Durante el mismo se determinaron dos estaciones para la toma de agua de diferentes profundidades, una más próxima a la cabecera del embalse, junto a la torre de captación, y otra en el centro de la masa de agua.

Investigadores equipando la embarcación

Posteriormente, el personal investigador se desplazó hasta el término municipal de Alcalá de los Gazules, donde se encuentra el embalse de Barbate. La explotación de este pantano también está orientada fundamentalmente al abastecimiento de los regadíos de la zona, si bien, su dimensión es muy superior a la del embalse de Celemín. El muestreo en este caso se realizó en un punto central de este reservorio.







Manga de zooplancton
Entre los trabajos realizados durante la jornada, cabe destacar el análisis de parámetros fundamentales que aportan información esencial acerca del estado de estos cuerpos de agua, como son el pH, la temperatura, conductividad, y el oxígeno disuelto para cada profundidad. Se tomaron además datos radiométricos y medidas de turbidez en la columna de agua. Adicionalmente, y para conocer en términos cuantitativos y cualitativos la composición de la comunidad planctónica de ambos embalses, se tomaron muestras integradas de agua para un posterior reconocimiento en laboratorio de los especímenes de fito y zooplancton capturados.






Botella oceanográfica "Van Dorn"
Cabe añadir que la posibilidad de realización de este tipo de muestreos en masas de agua superficiales y, consecuentemente los resultados obtenidos, dependen entre otros factores de las condiciones climatológicas.  Otro aspecto no menos importante es que para la adquisición de los datos limnológicos correspondientes se requiere un despliegue considerable de medios en cuanto a logística y equipamiento. A modo ilustrativo, tan solo para el desarrollo de la jornada de campo se hizo uso de instrumentos tan variados como mangas de zooplancton, botellas oceanográficas horizontales tipo “Van Dorn” para la toma de muestras de agua a profundidades seleccionadas, radiómetros, turbidímetros, colectores y sondas multiparamétricas, además de la pertinente embarcación tipo zodiac

Posteriormente, a la toma de muestras le sigue un minucioso procesamiento y análisis en el laboratorio, el cual comprende diferentes etapas que van desde la filtración y fijación de las muestras hasta la ulterior extracción de clorofila, la realización de perfiles espectrofotométricos y la determinación de la composición de iones y nutrientes de la mismas.

Fijación de muestras en laboratorio

Todo ello nos permitirá conocer aspectos tales como el estado trófico de los embalses en la cuenca de estudio, verificar la influencia de posibles aportes externos de nutrientes al sistema y analizar alternativas de gestión del agua dirigidas a una mejora de sus parámetros.

Por último, concluimos esta entrada del blog esperando que la misma os haya aportado un conocimiento más detallado acerca de los recursos hídricos de nuestra zona y de las etapas y preparativos previos que requiere una campaña limnológica.
¡Como siempre, os animamos a seguirnos y a compartir con nosotros todas aquellas sugerencias y cuestiones que consideréis puedan ser de interés para el proyecto!
¡Hasta la próxima semana!